La cuperosis es una afección dermatológica que se caracteriza por la aparición en la cara de rojeces, irritaciones y pequeños capilares dilatados en forma se ramificaciones.
Las rojeces son normales en algunos momentos, por ejemplo debido al frío durante el invierno; pero cuando estas se convierten en algo permanente y van aumentando, es cuando hablamos de cuperosis, Que si no tratamos de forma adecuada puede dar lugar a la aparición de rosacea con el tiempo.
¿A qué se debe?
Se produce por una alteración de la microcirculación sanguínea de los capilares que irrigan la piel de las mejillas, la nariz y el mentón.
¿Cuáles son los síntomas de la cuperosis?
El principal síntoma es el enrojecimiento que se produce en toda la zona debido al aumento de flujo sanguíneo que se produce al dilatarse las vénulas y arteriolas. Estos pequeños vasos, al ir perdiendo elasticidad, acaban por quedar dilatados sin volver a su tamaño normal. Estas rojeces y arañas vasculares pueden, o no estar acompañadas de ardor y calor en la zona.
También aparecen telangiectasas que son las pequeñas venas rojas o violáceas que se ven a través de la piel como filamentos ramificados con forma de tela de araña.
¿Cuáles son las causas?
Como hemos comentado, la cuperosis es debida a una afección de la microcirculación en la que los vasos sanguíneos permanecen dilatados, por lo que cualquier factor que provoque esta dilatación puede ser causa de cuperosis en personas predispuestas.
- Cambios bruscos de temperatura.
- Los golpes o pequeños traumatismos en la piel.
- Fumar y el consumo excesivo de alcohol.
- Aplicación sobre la piel de productos irritantes.
- La exposición al sol o lámparas de rayos UVA.
- Estrés, nervios o emociones intensas.
- Comidas y bebidas calientes, picantes o muy especiadas
- Patologías, como la hipertensión y la diabetes.
- Los cambios hormonales.
¿A quién afecta?
La cuperosis es más normal en las personas de piel clara, fina y sensible, al ser este tipo de piel más reactiva.
Afecta habitualmente más a las mujeres que a los hombres , además, existe una predisposición genética a padecerla (se hereda).
Cómo evitarlas.
Para prevenir la cuperosis principalmente debes evitar los factores que la desencadenan. Es fundamental evitar la exposición solar sin protectores. También, evitar el consumo de tóxicos como alcohol y tabaco y llevar una alimentación saludable rica en antioxidantes y vitaminas, como las frutas y las verduras.
Consejos para cuidar tu cuperosis.
Existen diferentes productos cosméticos que permiten aliviar y mitigar los efectos de la cuperosis en la piel:
- Limpia la piel dos veces al día con limpiadores suaves.
- Utiliza cremas muy hidratantes específicas para esta afección, que incluyen activos que ayudan a mejorar la circulación y calman la sensación de ardor, calor e irritación.
- Las cremas con color, tipo BB cream, son especialmente útiles. Disimulan el enrojecimiento.
- No uses exfoliantes ni peelings químicos que puedan irritar aún más la piel. Recomendable usar un peeling enzimático, que es más suave con las pieles delicadas.
- Protégete del sol siempre, a diario. También en invierno.
Si decides optar por la medicina estética, los tratamientos con láser, IPL y carboxiterapia, también ayuda a la mejora de esta patología. Recuerda que para recibir el tratamiento más adecuado a tu caso, debes acudir siempre a la consulta de un especialista
Si sigues estos pasos y consejos verás cómo consigues evitar en mayor medida la aparición de cuperosis o mejorarla si ya ha aparecido.
Información extraida de: https://www.leti.com/vivetupiel/cuperosis/
2 comentarios en “Cuperosis. Lo que necesitas saber.”
La cuperosis se puede quitar con el mismo procedimiento que las telangectaceas ?
Hola Mónica.
La cuperosis la tratamos con láser o IPL vasculares, no son exactamente iguales, pero se emplea la misma aparatología. Son procedimientos similares.
Saludos.
Equipo MED